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Conoce las ventajas del esmaltado permanente

Nuestras manos hablan sobre cómo es esa persona y su personalidad. Por eso es importante presentar unas manos cuidadas, pero, no siempre disponemos de las horas para hacernos la manicura. Si eres una de esas chicas que no disponen del suficiente tiempo, si te preocupa que tu manicura no aguante ni una semana… ¡La manicura permanente es la tuya! Eso de tener que perfeccionar cada pocos días tu manicura ha llegado a su fin gracias a la técnica permanente que, además, ofrece unos perfectos resultados como si tus uñas estuvieran recién pintadas durante varias semanas., ya que no tendrás que volver a tratarlas, ahorras tiempo, tus uñas resisten y tú quedarás despreocupada.

Pero, ¿qué es exactamente el esmaltado permanente?

Se trata de una técnica de manicura que pretende evitar tener que pintarse las uñas cada semana; es un tipo de esmalte que se aplica de forma rápida y sencilla y que, además, mantiene ese brille durante al menos tres semanas como si acabases de salir de hacerte la manicura. Ante la gran ventaja que supone esta técnica, gran parte de las mujeres han decidido probar la manicura permanente. La laca de uñas que hemos conocido, hasta ahora, tiene una consistencia líquida. Sin embargo, lo que se utiliza para realizar la manicura permanente se trata de un cosmético que posee tanto textura como consistencia en gel, lo que permite una mejor adherencia a la uña y secado más rápido. Además, con el esmaltado permanente se reduce el riesgo de que el color se desborde por encima de la uña y tiene mayor durabilidad con respecto a los esmaltes de toda la vida.

La forma en la que se aplica al igual que el esmalte tradicional y se seca con ayuda de una lámpara de LED que desprende calor y ayuda a que el gel llegue a ser más sólico con lo que se adhiere mejor a la uña. Algo que dura tanto… ¿Cómo podemos retirar este esmalte permanente? Pues bien, para quitar la laca permanente no podemos utilizar un quitaesmalte normal, ya que será prácticamente imposible. Hay que recurrir a productos especiales que logran conseguir que el producto se disuelva sin forzar la retirada del mismo y logramos así proteger la uña.

¿Cómo se aplica el esmaltado permanente?

En realidad, la aplicación del esmaltado permanente es similar a la de otro tipo de esmalte normal o tradicional. Primero se realiza una manicura, se lima las uñas, se retiran las cutículas, se retiran los cueros y se quita el brillo limando con mucha suavidad las uñas. Después se aplica un primer, el líquido que hace que la uña consiga una mayor adherencia para que, a continuación, pueda fijarse de forma óptima la laca permanente. Para que el esmalte quede bien y se aplican varias capas, según el color, y por último, una capa de gel que termina de fijar el esmalte.

Mayor durabilidad

Hace ya varios años que la manicura permanente es tendencia entre la sociedad; no hay duda de que es la primera opción a la hora de elegir la forma de hacerse las uñas. Esto se debe a que son capaces de aguantar sin que el esmalte se estropee hasta tres semanas. Sin duda alguna, una de las mayores ventajas de esta técnica, al durar casi un mes impecables, es el ahorro de tiempo que supone.

Resistencia

Las lacas de toda la vida son sensibles al agua y en un par de días podemos ver como empieza a eliminarse el esmalte en forma de antiestéticos desconchones, ¡esto no ocurre con el gel! La manicura permanente es resistente al agua y a los golpes, con ella se evita el desgaste del esmalte. De esta forma, conseguimos unas manos cuidadas, aunque trabajemos con productos de limpieza o sanitarios.

Protege las uñas

Con el esmalte permanente se crea algo similar a una capa protectora alrededor de nuestra uña, solo así se puede evitar que se llegue a romper. Esto también ayuda a que eliminar la manía de mordernos las uñas.

Secado inmediato

Una de las principales desventajas de pintarse las uñas, o de hacerse la manicura tradicional, es el tiempo que tenemos que esperar a que la pintura esté totalmente seca. Por el contrario, la ventaja del permanente es que no existe este problema.

Al introducir en una lámpara LED especial para fijar la manicura, el esmalte queda totalmente adherido, y lo mejor es que puedes utilizar tus manos con total normalidad sin correr el riesgo de que puedan estropearse.